La incapacidad histórica de Antonio Escohotado para escribir sus obras
3 participantes
El foro nuevo :: ACTUALIDAD :: Política
Página 1 de 1.
La incapacidad histórica de Antonio Escohotado para escribir sus obras
Cuando hablo con los que han leído "Los enemigos del comercio" del señor Escohotado, me doy cuenta de este punto crucial: la incapacidad histórica para luego ponerse a parrafear lo que llamo "ideas porque sí de lo que yo quiera" que para colmo se pretenden de contenido académico.
Véase por ejemplo el primer volumen de "Los enemigos del comercio", donde se puede dar por sentado que los últimos 200 años del movimiento obrero merecían otra perspectiva; pero los llamados enemigos del comercio están ausentes en el siglo XIX. Escohotado dedica cinco capítulos a los cooperativistas anglosajones, partidarios de la división del trabajo y el intercambio de mercancías, otros cuatro a Marx y Engels, donde la única objeción visible contra la competencia es la tendencia a formar monopolios naturales, es decir, racionales. Entre mutualistas franceses, liberales laboristas británicos y sindicalistas norteamericanos, los amigos del comercio ocupan un tercio del trabajo.
A juzgar por los actos comunistas, la Tercera y la Cuarta Internacional apoyaron ante todo movimientos de independencia nacional-popular que terminaron beneficiando el comercio internacional a largo plazo una vez finalizadas las deficitarias posesiones de ultramar europeas. Dicho de otra forma, ¿no sería el imperialismo novecentista el equivalente de la esclavitud en la Antigüedad: un freno a la empresa privada en lugar de un incentivo? es decir, un derecho de expolio opuesto por completo a las relaciones contractuales voluntarias, o, dicho brevemente, un enemigo del comercio. Escohotado omite información sobre el Tercer Mundo, siendo su historia moral de la propiedad una que no dedica una sola página -de las más de mil doscientas publicadas- por ejemplo, a Latinoamérica.
En el primer volumen, mientras Escohotado analiza la caída del Imperio Romano, arroja una afirmación bastante determinante donde, el tráfico de esclavos y las relaciones de servidumbre contravienen por principio el desarrollo económico. En el segundo volumen con la oportunidad de corroborar la veracidad de su postura, usando la economía yanqui sureña, elude el asunto cuando justamente los negros, perteneciendo a un momento clave en el tópico, desaparecen del índice analítico mientras Lincoln solo figura de segundas. No aparecen formuladas las razones para esta evasión al respecto de la Guerra de Secesión, como si el movimiento abolicionista no constituyera el epítome de las esperanzas fanáticas, guerra-civilistas y contrarias a la propiedad privada (sobre otros humanos) que este libro pretende desmontar en términos históricos; o sea, siguiendo el análisis de Escohotado, las plantaciones esclavistas desincentivaron a los pequeños emprendedores norteamericanos.
Escohotado además, se posiciona por un bando; defiende a Saint-Simon ante la mala lectura realizada por Isaiah Berlin, quien supuestamente lo señala de comunista expropiador, cuando a juicio del autor de la incompleta trilogía, estamos más bien ante un modelo de liberal socialmente comprometido y apoyado sobre una historia realista (próxima a Hegel) del desarrollo histórico.
Por otro lado afirma que desde un punto de vista liberal el tratado teológico-político "es como la piedra miliar de las bóvedas antiguas [...] solo ella puede absorber las tensiones de cada arco". Y dicho ésto, el autor podría estar colocando a Keynes y Hayek en una misma línea ideológica, o sea más en común que en contra, pues en este tipo de exposiciones de su pensamiento deja entrever posturas poco verosímiles como el que denomina "socialismo individualista", donde Durkheim podría llegar a suscribir, siguiendo las preposiciones del autor.
También puede observarse en sus postulados otras interesantes sorpresas, como cuando arremete contra el llamado liberalismo maximalista, señalando a Mises y Rothbard, quienes juzgan que la crisis de fin de ciclo (1873-1896) y la existencia misma de ciclos económicos se debe a "las acrobacias sin red permitidas por el papel moneda", el acuñado por los bancos centrales sin el respaldo de un ahorro efectivo. Según muchos, esta sería incluso la causa última de la crisis actual. Su postura al respecto del endeudamiento estaría así entre dos aguas: la idea austriaca de que el multiplicador keynesiano es "un desideratum vestido de aparato matemático" y, el entender que a veces "los gobiernos deben gastar lo no ahorrado para evitar males mayores".
La frase más ambigua y repetida de la trilogía quizá sea "prosperidad y crisis se solicitan recíprocamente" ¿en qué sentido? El autor esta incógnita no la desarrolla.
La idea de estipular impuestos elevados sobre las herencias, y distribuir aquella propiedad que depende de la cuna y de la sucesión en lugar del mérito, es algo expresado muchas veces en el siglo XIX. Tipos sociales tan distantes como afines a cierto espíritu igualitario y meritocrático, tal que un aristócrata libertario (Bakunin), un noble liberal (Saint-Simon) y un empresario filantrópico (Carnegie, de quien se puede leer sobre su frase "quien muere rico muere deshonrado"), formularon propuestas semejantes, donde nadie merece nacer rico ni pobre. Escohotado no está convencido acerca de las virtudes de dicha idea, pues para él, abolir el derecho sucesorio convertiría a todos en dependientes de algún tipo de Ministerio de Hacienda; además de desincentivar -añade- el emprendimiento.
Pero no tiene por qué ser así. La temible dependencia puede variar según los mecanismos de distribución de las oportunidades que acompañan a la riqueza, ya sea indirectamente (inversión en servicios públicos) o directamente (Renta Básica Universal).
Por último, Escohotado tiende a señalar la falta de aparato crítico en los teóricos del materialismo histórico, empezando por la tesis de Marx sobre Demócrito y Epicuro, pésimamente documentada a su juicio. Sin embargo, a juzgar por el índice bibliográfico de ambos tomos, el autor maneja un volumen de libros algo discreto (30 páginas de títulos) para tratarse de una historia del comunismo remontada hasta los primeros pobladores. Autores clásicos aparecen en gran cantidad centralizando las notas a pie de página, mientras abundan sobre todo las citas de Gibbons, Hayek, Hume o Schumpeter; incluso incluye pocas discusiones entre historiadores recientes, inclinando casi siempre la balanza en beneficio de la "historia socialmente comprometida", y demasiadas veces aparece Wikipedia como fuente última de información.
Los datos indican la presencia de fuentes primarias a fin de cuentas, como puede verse en la introducción; subraya el autor que desde 2005 accede a ellas gracias a internet, y los capítulos sobre el contexto de la Primera Internacional dan buena cuenta de cuanto habrá usado el 'Marxist Internet Archive' para consultar determinados originales.
Véase por ejemplo el primer volumen de "Los enemigos del comercio", donde se puede dar por sentado que los últimos 200 años del movimiento obrero merecían otra perspectiva; pero los llamados enemigos del comercio están ausentes en el siglo XIX. Escohotado dedica cinco capítulos a los cooperativistas anglosajones, partidarios de la división del trabajo y el intercambio de mercancías, otros cuatro a Marx y Engels, donde la única objeción visible contra la competencia es la tendencia a formar monopolios naturales, es decir, racionales. Entre mutualistas franceses, liberales laboristas británicos y sindicalistas norteamericanos, los amigos del comercio ocupan un tercio del trabajo.
A juzgar por los actos comunistas, la Tercera y la Cuarta Internacional apoyaron ante todo movimientos de independencia nacional-popular que terminaron beneficiando el comercio internacional a largo plazo una vez finalizadas las deficitarias posesiones de ultramar europeas. Dicho de otra forma, ¿no sería el imperialismo novecentista el equivalente de la esclavitud en la Antigüedad: un freno a la empresa privada en lugar de un incentivo? es decir, un derecho de expolio opuesto por completo a las relaciones contractuales voluntarias, o, dicho brevemente, un enemigo del comercio. Escohotado omite información sobre el Tercer Mundo, siendo su historia moral de la propiedad una que no dedica una sola página -de las más de mil doscientas publicadas- por ejemplo, a Latinoamérica.
En el primer volumen, mientras Escohotado analiza la caída del Imperio Romano, arroja una afirmación bastante determinante donde, el tráfico de esclavos y las relaciones de servidumbre contravienen por principio el desarrollo económico. En el segundo volumen con la oportunidad de corroborar la veracidad de su postura, usando la economía yanqui sureña, elude el asunto cuando justamente los negros, perteneciendo a un momento clave en el tópico, desaparecen del índice analítico mientras Lincoln solo figura de segundas. No aparecen formuladas las razones para esta evasión al respecto de la Guerra de Secesión, como si el movimiento abolicionista no constituyera el epítome de las esperanzas fanáticas, guerra-civilistas y contrarias a la propiedad privada (sobre otros humanos) que este libro pretende desmontar en términos históricos; o sea, siguiendo el análisis de Escohotado, las plantaciones esclavistas desincentivaron a los pequeños emprendedores norteamericanos.
Escohotado además, se posiciona por un bando; defiende a Saint-Simon ante la mala lectura realizada por Isaiah Berlin, quien supuestamente lo señala de comunista expropiador, cuando a juicio del autor de la incompleta trilogía, estamos más bien ante un modelo de liberal socialmente comprometido y apoyado sobre una historia realista (próxima a Hegel) del desarrollo histórico.
Por otro lado afirma que desde un punto de vista liberal el tratado teológico-político "es como la piedra miliar de las bóvedas antiguas [...] solo ella puede absorber las tensiones de cada arco". Y dicho ésto, el autor podría estar colocando a Keynes y Hayek en una misma línea ideológica, o sea más en común que en contra, pues en este tipo de exposiciones de su pensamiento deja entrever posturas poco verosímiles como el que denomina "socialismo individualista", donde Durkheim podría llegar a suscribir, siguiendo las preposiciones del autor.
También puede observarse en sus postulados otras interesantes sorpresas, como cuando arremete contra el llamado liberalismo maximalista, señalando a Mises y Rothbard, quienes juzgan que la crisis de fin de ciclo (1873-1896) y la existencia misma de ciclos económicos se debe a "las acrobacias sin red permitidas por el papel moneda", el acuñado por los bancos centrales sin el respaldo de un ahorro efectivo. Según muchos, esta sería incluso la causa última de la crisis actual. Su postura al respecto del endeudamiento estaría así entre dos aguas: la idea austriaca de que el multiplicador keynesiano es "un desideratum vestido de aparato matemático" y, el entender que a veces "los gobiernos deben gastar lo no ahorrado para evitar males mayores".
La frase más ambigua y repetida de la trilogía quizá sea "prosperidad y crisis se solicitan recíprocamente" ¿en qué sentido? El autor esta incógnita no la desarrolla.
La idea de estipular impuestos elevados sobre las herencias, y distribuir aquella propiedad que depende de la cuna y de la sucesión en lugar del mérito, es algo expresado muchas veces en el siglo XIX. Tipos sociales tan distantes como afines a cierto espíritu igualitario y meritocrático, tal que un aristócrata libertario (Bakunin), un noble liberal (Saint-Simon) y un empresario filantrópico (Carnegie, de quien se puede leer sobre su frase "quien muere rico muere deshonrado"), formularon propuestas semejantes, donde nadie merece nacer rico ni pobre. Escohotado no está convencido acerca de las virtudes de dicha idea, pues para él, abolir el derecho sucesorio convertiría a todos en dependientes de algún tipo de Ministerio de Hacienda; además de desincentivar -añade- el emprendimiento.
Pero no tiene por qué ser así. La temible dependencia puede variar según los mecanismos de distribución de las oportunidades que acompañan a la riqueza, ya sea indirectamente (inversión en servicios públicos) o directamente (Renta Básica Universal).
Por último, Escohotado tiende a señalar la falta de aparato crítico en los teóricos del materialismo histórico, empezando por la tesis de Marx sobre Demócrito y Epicuro, pésimamente documentada a su juicio. Sin embargo, a juzgar por el índice bibliográfico de ambos tomos, el autor maneja un volumen de libros algo discreto (30 páginas de títulos) para tratarse de una historia del comunismo remontada hasta los primeros pobladores. Autores clásicos aparecen en gran cantidad centralizando las notas a pie de página, mientras abundan sobre todo las citas de Gibbons, Hayek, Hume o Schumpeter; incluso incluye pocas discusiones entre historiadores recientes, inclinando casi siempre la balanza en beneficio de la "historia socialmente comprometida", y demasiadas veces aparece Wikipedia como fuente última de información.
Los datos indican la presencia de fuentes primarias a fin de cuentas, como puede verse en la introducción; subraya el autor que desde 2005 accede a ellas gracias a internet, y los capítulos sobre el contexto de la Primera Internacional dan buena cuenta de cuanto habrá usado el 'Marxist Internet Archive' para consultar determinados originales.
Abysso- Mensajes : 2592
Fecha de inscripción : 07/12/2020
Localización : Yuggoth
Re: La incapacidad histórica de Antonio Escohotado para escribir sus obras
Como es bien sabido, la practica totalidad de los documentos históricos depositados en archivos y otras entidades, imprescindibles para el trabajo de los historiadores, se hallan colgados en la red. Intentar desprestigiar a nadie porque haga consultas en la red, me parece un argumento excesivamente trivial.
_________________
¡Ya sé de dónde vengo, ya sé quién soy! ¡A ver si me aclaro dónde voy!
Porsituquieressaber- Mensajes : 16812
Fecha de inscripción : 29/01/2021
Re: La incapacidad histórica de Antonio Escohotado para escribir sus obras
Entrevista interesante a Escohotado:
Hay que tener en cuenta, quien hace la entrevista y donde se publica.
https://ernestocastro.com/biblioteca/marx-engels-blanqui-bakunin-lenin-trotsky-y-mao-tambien-fidel-y-el-che-fueron-unos-mantenidos-entrevista-a-antonio-escohotado/
Hay que tener en cuenta, quien hace la entrevista y donde se publica.
https://ernestocastro.com/biblioteca/marx-engels-blanqui-bakunin-lenin-trotsky-y-mao-tambien-fidel-y-el-che-fueron-unos-mantenidos-entrevista-a-antonio-escohotado/
_________________
¡Ya sé de dónde vengo, ya sé quién soy! ¡A ver si me aclaro dónde voy!
Porsituquieressaber- Mensajes : 16812
Fecha de inscripción : 29/01/2021
Re: La incapacidad histórica de Antonio Escohotado para escribir sus obras
Justamente puse la entrevista en video, por lo tanto sí puse quién es el entrevistador, además del resumen.
Abysso- Mensajes : 2592
Fecha de inscripción : 07/12/2020
Localización : Yuggoth
Re: La incapacidad histórica de Antonio Escohotado para escribir sus obras
No es la parte más importante de la entrevista, pero claramente Escohotado tiende a señalar la falta de aparato crítico en los teóricos del materialismo histórico, empezando por la tesis de Marx sobre Demócrito y Epicuro, pésimamente documentada a su juicio.Porsituquieressaber escribió:... Intentar desprestigiar a nadie porque haga consultas en la red, me parece un argumento excesivamente trivial.
Luego, el mismo Escohotado:
Ergo, es un señalamiento muy adecuado de considerar.... maneja un volumen de libros algo discreto (30 páginas de títulos) para tratarse de una historia del comunismo remontada hasta los primeros pobladores. Autores clásicos aparecen en gran cantidad centralizando las notas a pie de página, mientras abundan sobre todo las citas de Gibbons, Hayek, Hume o Schumpeter; incluso incluye pocas discusiones entre historiadores recientes, inclinando casi siempre la balanza en beneficio de la "historia socialmente comprometida", y demasiadas veces aparece Wikipedia como fuente última de información.
Abysso- Mensajes : 2592
Fecha de inscripción : 07/12/2020
Localización : Yuggoth
A doonga le gusta esta publicaciòn
Re: La incapacidad histórica de Antonio Escohotado para escribir sus obras
Porsituquieressaber escribió:Como es bien sabido, la practica totalidad de los documentos históricos depositados en archivos y otras entidades, imprescindibles para el trabajo de los historiadores, se hallan colgados en la red. Intentar desprestigiar a nadie porque haga consultas en la red, me parece un argumento excesivamente trivial.
No necesariamente.
Es más, hay información que he buscado, y he tenido que recurrir, finalmente, a bibliotecas europeas para obtener la documentación.
_________________
Jamás comprenderás la inmensidad de la nada
Re: La incapacidad histórica de Antonio Escohotado para escribir sus obras
Abysso escribió:Justamente puse la entrevista en video, por lo tanto sí puse quién es el entrevistador, además del resumen.
Disculpa Abysso, me he expresado mal.
Sólamente es que me ha extrañado que se critique la consulta en la mayor fuente de información mundial como es la red. En la red, como en cualquier biblioteca, hay de todo. El que sabe buscar y conoce las fuentes, puede hacer consultas de una manera muy rápida que de otra manera llevaría mucho tiempo y desplazamientos. Las entradas de Wikipedia tienen cantidad de referencias y bibliografias que también ayudan. Obviamente, para un especialista en lo que sea, puede no ser suficiente, pero es evidente que la herramienta tiene una eficacia muy alta.
Porsituquieressaber- Mensajes : 16812
Fecha de inscripción : 29/01/2021
Re: La incapacidad histórica de Antonio Escohotado para escribir sus obras
doonga escribió:Porsituquieressaber escribió:Como es bien sabido, la practica totalidad de los documentos históricos depositados en archivos y otras entidades, imprescindibles para el trabajo de los historiadores, se hallan colgados en la red. Intentar desprestigiar a nadie porque haga consultas en la red, me parece un argumento excesivamente trivial.
No necesariamente.
Es más, hay información que he buscado, y he tenido que recurrir, finalmente, a bibliotecas europeas para obtener la documentación.
Obviamente TODO no está en la red, pero la mayoría de los grandes museos, bibliotecas, pinacotecas, etc, tienen digitalizados sus contenidos.
¿Tuvo usted que venir a Europa para realizar sus consultas?
Porsituquieressaber- Mensajes : 16812
Fecha de inscripción : 29/01/2021
Re: La incapacidad histórica de Antonio Escohotado para escribir sus obras
Creo que me has citado mal, pero si de ello quieres hablar, te tengo que volver a recordar nuevamente la queja de Escohotado, donde le duele la pésima documentación... justamente eso es lo que él hace si no puede citar de las fuentes directas y recurre a liviandades como Wikipedia ¿o no leíste cuál era el punto cuando se menciona que para tratarse de una historia del comunismo remontada hasta los primeros pobladores...?Porsituquieressaber escribió:Abysso escribió:Justamente puse la entrevista en video, por lo tanto sí puse quién es el entrevistador, además del resumen.
Disculpa Abysso, me he expresado mal.
Sólamente es que me ha extrañado que se critique la consulta en la mayor fuente de información mundial como es la red. En la red, como en cualquier biblioteca, hay de todo. El que sabe buscar y conoce las fuentes, puede hacer consultas de una manera muy rápida que de otra manera llevaría mucho tiempo y desplazamientos. Las entradas de Wikipedia tienen cantidad de referencias y bibliografias que también ayudan. Obviamente, para un especialista en lo que sea, puede no ser suficiente, pero es evidente que la herramienta tiene una eficacia muy alta.
Escohotado se quejaba mucho sobre la supuesta falta de aparato crítico en los teóricos del materialismo histórico, y luego vas a su trilogía y decide hacerlo 6 veces peor, es decir, de un nivel para la secundaria con sus wikipedismos y demás simplificaciones banales ¿A qué lleva luego esa falta de rigor académico? justamente a la primera crítica que aparece en el primer post del hilo: el muy conveniente olvido de ciertos eventos históricos para así hacer cuadrar lo que se le antoja.
Véase por ejemplo el primer volumen de "Los enemigos del comercio", donde se puede dar por sentado que los últimos 200 años del movimiento obrero merecían otra perspectiva; pero los llamados enemigos del comercio están ausentes en el siglo XIX.
Abysso- Mensajes : 2592
Fecha de inscripción : 07/12/2020
Localización : Yuggoth
A doonga y a Giordano Bruno de Nola les gusta esta publicaciòn
Temas similares
» Ayer murió Antonio Escohotado
» Antonio Escohotado habla sobre la figura de Karl Marx.
» La Biblia... ¿Es toda inspirada por Dios, o toda palabra de Dios?...
» ¿Matar a los enemigos o amar a los enemigos?, ¿Qué nos mandó Jesucristo?
» El día de Reyes (sabios de Oriente) es para adorar a Jesucristo y no a los magos ni la magia...
» Antonio Escohotado habla sobre la figura de Karl Marx.
» La Biblia... ¿Es toda inspirada por Dios, o toda palabra de Dios?...
» ¿Matar a los enemigos o amar a los enemigos?, ¿Qué nos mandó Jesucristo?
» El día de Reyes (sabios de Oriente) es para adorar a Jesucristo y no a los magos ni la magia...
El foro nuevo :: ACTUALIDAD :: Política
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.