El accidentado camino de la libertad

 EL ACCIDENTADO CANmINO DE LA LIBERTAD

Estos últimos días en los que en el Congreso de los diputados se acaba de aprobar por escasa mayoría el nuevo y tan controvertido Estatut de Catalunya, me han recordado, junto a las palabras de nuestro amigo en el foro, Garellano de “cuando corríamos delante de los grises”, de cuando de madrugada repartíamos octavillas, y nos reuníamos clandestinamente.
Los determinantes y valientes que fuimos los de aquella, nuestra generación que luchó sin medida contra una tiranía dictatorial que se alargaba infinitamente en el tiempo, y que aunque no se la derrotó pues murió de vejez, hicieron de nuestros escasos veinte años una voluntad que arrasaba la injusticia a su paso.

Esa idea en común, pudo mucho, e hicimos todo Io que estuvo en nuestras manos para frenar aquella censura social y militar que nos relegaba y estancaba en la lista de paises mudos en el mundo, presos y pobres, esclavos de una dictadura, Éramos muy nobles en nuestras ideas y en nuestras convicciones, y en esas enormes ganas de libertad para España, vivíamos tan confiados que junto a nosotros, con nuestros objetivos se mezclaban otros que estaban muy lejos de nuestro horizontes, pero que aprovecharon nuestro ímpetu juvenil para sembrar otros caminos de libertad, que todavía en aquellos años quedaban lejos y muy imposible de conseguir, la independencia de los diferentes pueblos o regiones de España. Opciones respetables pero difíciles de admitir para un pueblo oprimido y en ese principio de libertad, solo quería romper las cadenas de una dictadura tenaz y asesina.

La Constitución de 1978 lejos de unir a los Españoles no contento a todos y alejó a los españoles que solo querían libertad, pero para una España unida de los que esperaban ver una camino abierto para sus aspiraciones de un total autogobierno que los llevara tiempo después a la independencia. Así que sin proponérselo, los políticos elegidos por el pueblo, crearon otra vez las dos Empañas, pues otorgaban a las regiones históricas el rango de autonomías, y eso “molestaba” a una parte de población educada en la idea de la España libre y democrática, única y grande pero ausente de lo que creían olvidadas como eran las antiguas reclamaciones de Euzkadì y Cataluña.

El camino que entonces era una utopía inalcanzable se ha estado recorriendo, la libertad se ha crecido en ella misma, y se ha hecho mayor de edad en las mentes de las nuevas generaciones, y hoy España, las actuales generaciones, y en todas las circunstancias piensan muy diferente, y con mas amplitud de miras que nosotros. La España única de nosotros es para un vasco educado desde niño en sus raíces, es algo lejano, pues su pais, el que tiene como propio y único es el Pais Vasco que es, y ama como su tierra, igual que lo es Cataluña para un catalán de nuestros dias, se han educado en la apreciación de que España es solo una tierra que nos une.

La España del S.XXl es como es y nadie puede cambiarla, los cuidadnos votan a sus políticos y las leyes equivocadas o no, emanan de la voluntad popular que es el pueblo radicado en los parlamentos. Por eso los que amamos a España como un todo indivisible, pero que por encima de todo somos demócratas, tenemos que respetar la voluntad de unos pueblos de España que quieren seguir su destino libremente.

Rocinante 02/04/2006