Axel Honneth y el Reconocimiento
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Axel Honneth y el Reconocimiento
Discutamos de filosofía, pondré libros de autores a ver si le entran
Giordano Bruno de Nola- Mensajes : 37756
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Re: Axel Honneth y el Reconocimiento
El primer texto es muy importante pues nos pone en el contexto del fundamento contractualista del Estado moderno. Para la literatura anglosajona el Estado se funda en el principio de la sobrevivencia, de la seguridad, de la necesidad de preservar los derechos inalienables del derecho natural. Como la sociedad concurrencial no los garantiza, entonces delegamos en la autoridad el gobierno (Hobbes) o pactamos con el gobierno la garantía de un buen gobierno (Locke). Rousseau parte de que es un mal necesario ante el problema de la convivencia humana. La autoridad se justifica entonces en la convivencia y en la ética.
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Re: Axel Honneth y el Reconocimiento
Me devoro el segundo libro. Pronto lo discutiré con mis amigos.
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Re: Axel Honneth y el Reconocimiento
Voy avanzando y pronto les comenzaré a platicar sobre el libro de las ideas de Europa que me ha parecido excelente.
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Re: Axel Honneth y el Reconocimiento
El último texto de Honneth es muy bueno.
Hace un desarrollo del concepto reconocimiento en la literatura anglosajona (Hume, Hobbes, Locke, Stuart Mill), la literatura francesa (Voltaire, Montesquieu y Rousseau) hasta llegar a la Filosofía clásica alemana (Kant, Fichte, Hegel).
El Estado se funda en la necesidad de las relaciones entre seres humanos en la sociedad y su carácter conflictivo. Para la literatura anglosajona el Estado se funda en la necesidad de que la conflictividad humana lleva a la violencia y esa violencia si no es regulada puede suprimir los derechos naturales (vida, libertad, felicidad) y llevarnos al caos. La naturaleza malvada del ser humano requiere de delegar el poder a un hombre más fuerte y su poder o a una asamblea de hombres que sirva de árbitro en los conflictos sociales. Para Hobbes el Leviatán, el Estado, organismo que se levanta como autoridad es inapelable y necesario. Locke matiza diciendo que el árbitro tiene que garantizar los derechos para que el pacto se cumpla. Honneth nos dice que el reconocimiento entre seres humanos debe ser por el consenso o la simpatía de los demás.
Para la literatura francesa, los demás son un obstáculo para la libertad propia. Sin embargo, los demás existen y por desgracia humana se requiere la convivencia. Luego entonces el reconocimiento de mi libertad individual se proyecta universalmente en los otros mediante lo que tenemos en común, el bien general y eso me lleva a establecer un contrato social. Por lo tanto, el reconocimiento se funda en la empatía.
La carencia de las visiones anteriores es que impulsa a los seres humanos a buscar ese bien común. Para Kant la libertad y las relaciones de reconocimiento no se fundan sobre la simpatía natural o el egoísmo empático. Supone ante todo que los seres civilizados somos ante todo racionales y por lo tanto como racionales que somos debemos tener relaciones sobre la base del respeto. Personas civilizadas se respetan porque piensan son civilizadas. Pero ¿Qué impulsa a los seres humanos a respetarse entre sí? Fichte a diferencia de Kant establece que las relaciones son una actividad en juego y por lo tanto es una relación práctica. El ser humano se trasciende en el otro construyendo relaciones en las que lo hacen su semejante.
Hegel que es un pensador dialéctico no se queda en la relación trascendente de la subjetividad de Fichte. Para el joven Wilhelm desde estudiante en Jena la relación subjetiva del ser humano con sus semejantes no sólo es subjetiva, sino que también se construye en la consciencia objetiva. Los seres humanos construimos nuestras relaciones objetivas porque es la manera en la que elección proyecta nuestra necesidad de libertad. Y pone como ejemplo el amor. Cuando yo elijo a una persona limito mi propia acción subjetiva a condición de no suprimir la acción subjetiva del ser amado. Esto es a condición de que la otra persona me responda con la misma intención, es decir me sea recíproca, que la decisión vincule mi subjetividad y mi libertad al mismo tiempo; y que el resto del medio social vea con legitimidad la relación. Esto refiere las relaciones de pareja, las parentales, filiales y sobre todo familiares.
En el terreno social, la existencia de otros nos lleva a la construcción de relaciones que en paralelo se norman. Los conflictos sociales se resuelven con normas y esas normas constituyen la base del Estado. El reconocimiento es un concepto que acompaña a Hegel desde sus escritos de juventud en Jena, pasando por la Fenomenología del Espíritu y concluyendo con su Filosofía del Derecho.
Hace un desarrollo del concepto reconocimiento en la literatura anglosajona (Hume, Hobbes, Locke, Stuart Mill), la literatura francesa (Voltaire, Montesquieu y Rousseau) hasta llegar a la Filosofía clásica alemana (Kant, Fichte, Hegel).
El Estado se funda en la necesidad de las relaciones entre seres humanos en la sociedad y su carácter conflictivo. Para la literatura anglosajona el Estado se funda en la necesidad de que la conflictividad humana lleva a la violencia y esa violencia si no es regulada puede suprimir los derechos naturales (vida, libertad, felicidad) y llevarnos al caos. La naturaleza malvada del ser humano requiere de delegar el poder a un hombre más fuerte y su poder o a una asamblea de hombres que sirva de árbitro en los conflictos sociales. Para Hobbes el Leviatán, el Estado, organismo que se levanta como autoridad es inapelable y necesario. Locke matiza diciendo que el árbitro tiene que garantizar los derechos para que el pacto se cumpla. Honneth nos dice que el reconocimiento entre seres humanos debe ser por el consenso o la simpatía de los demás.
Para la literatura francesa, los demás son un obstáculo para la libertad propia. Sin embargo, los demás existen y por desgracia humana se requiere la convivencia. Luego entonces el reconocimiento de mi libertad individual se proyecta universalmente en los otros mediante lo que tenemos en común, el bien general y eso me lleva a establecer un contrato social. Por lo tanto, el reconocimiento se funda en la empatía.
La carencia de las visiones anteriores es que impulsa a los seres humanos a buscar ese bien común. Para Kant la libertad y las relaciones de reconocimiento no se fundan sobre la simpatía natural o el egoísmo empático. Supone ante todo que los seres civilizados somos ante todo racionales y por lo tanto como racionales que somos debemos tener relaciones sobre la base del respeto. Personas civilizadas se respetan porque piensan son civilizadas. Pero ¿Qué impulsa a los seres humanos a respetarse entre sí? Fichte a diferencia de Kant establece que las relaciones son una actividad en juego y por lo tanto es una relación práctica. El ser humano se trasciende en el otro construyendo relaciones en las que lo hacen su semejante.
Hegel que es un pensador dialéctico no se queda en la relación trascendente de la subjetividad de Fichte. Para el joven Wilhelm desde estudiante en Jena la relación subjetiva del ser humano con sus semejantes no sólo es subjetiva, sino que también se construye en la consciencia objetiva. Los seres humanos construimos nuestras relaciones objetivas porque es la manera en la que elección proyecta nuestra necesidad de libertad. Y pone como ejemplo el amor. Cuando yo elijo a una persona limito mi propia acción subjetiva a condición de no suprimir la acción subjetiva del ser amado. Esto es a condición de que la otra persona me responda con la misma intención, es decir me sea recíproca, que la decisión vincule mi subjetividad y mi libertad al mismo tiempo; y que el resto del medio social vea con legitimidad la relación. Esto refiere las relaciones de pareja, las parentales, filiales y sobre todo familiares.
En el terreno social, la existencia de otros nos lleva a la construcción de relaciones que en paralelo se norman. Los conflictos sociales se resuelven con normas y esas normas constituyen la base del Estado. El reconocimiento es un concepto que acompaña a Hegel desde sus escritos de juventud en Jena, pasando por la Fenomenología del Espíritu y concluyendo con su Filosofía del Derecho.
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Re: Axel Honneth y el Reconocimiento
Concluí el texto y los discutimos.
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