Óperas y Zarzuelas

Argumento: Frente a la casa del doctor Don Bartolo el conde de Almaviva canta una serenata para Rosina, la joven de quien está enamorado y es pupila de Don Bartolo. Antes de que Rosina aparezca, el barbero Fígaro, viejo conocido del conde, hace acto de presencia explicándole al conde que Rosina, en realidad, no está emparentada con Don Bartolo, sino que solo es su tutor, si bien intenta contraer matrimonio con ella para adueñarse así de su abundante patrimonio. El conde disfraza su identidad para presentarse como un pobre estudiante de nombre Lindero, y canta su segunda serenata que sí llega a oídos de Rosina.

Rosina entrega a Fígaro una nota para Lindero. Don Bartolo en una conversación privada pone al corriente a Don Basilio, maestro de música de Rosina, sobre las intenciones del conde de Almaviva, y éste logra escuchar la conversación. Don Bartolo y Don Basilio acuerdan suscribir el contrato de matrimonio. El conde, aconsejado por Fígaro, se disfraza de soldado para entrar en casa de la joven, pero Don Bartolo se niega a que logre su propósito y se crea una trifulca teniendo que intervenir los verdaderos soldados. El conde es detenido y para no ser arrestado se ve en la necesidad de confesar su verdadera personalidad a los soldados.

En un nuevo intento de entrar en casa de Rosina, el conde se disfraza de maestro de música y se presenta en casa de Don Bartolo explicando que toma el relevo de Don Basilio al estar éste enfermo. Mientras Rosina toma la lección se presenta Fígaro y poco después el supuestamente enfermo Don Basilio. Don Bartolo echa de su casa al conde y a Fígaro, y llama se presente inmediatamente el Notario para certificar su matrimonio. Una vez llega el Notario, Fígaro en un aparte lo convence para que el matrimonio de la joven Rosina sea con el conde, del cual está verdaderamente enamorada. Una vez realizado éste, Don Bartolo se ve en la obligación de felicitar a la nueva y joven pareja.

Argumento: La acción se desarrolla en Rusia a finales del siglo XVII, en el marco de la profunda crisis que abrió en enfrentamiento directo y violento entre los partidos de dos opciones político sociales que representaban en realidad toda una misma concepción de la misma idea de Rusia.

Tales luchas entre eslavófilos y partidarios de la occidentalización del extenso imperio tuvieron especial virulencia entre 1682 y 1689 a raíz de la rebelión del cuerpo de arqueros conocido como los “streltsi”, un brazo armado creado por Iván el Terrible. Estos soldados, firmes partidarios de mantener las estructuras tradicionales, gozaban de los privilegios en su condición de guardia personal del zar y se levantaron en armas ante los cambios occidentalizantes promovidos por Pedro el Grande.

Esta obra la compuso su autor como un gran fresco histórico y épico destinado a relatar el ocaso de la vieja Rusia en tres óperas. Era la segunda parte de una trilogía encabezada por “Boris Godunov” y que acabaría con “La hija del capitán”, obra nunca terminada.

Violetta Valèry, una cortesana de la alta sociedad parisiense, organiza una gran fiesta. Le presentan a un joven admirador, el estudiante Alfredo Germont. Ella queda impresionada al conocer que el joven se ha interesado por su estadoo de salud desde el primer día de su enfermedad. Mientras los invitados se dirigen a la sala de baile, Violetta se queda atrás, súbitamente encontrándose mal. Sólo Alfredo, inquieto y preocupado, se queda con ella y, apasionadamente, le declara su amor. Violetta controla su confusión respondiéndole con increíble desprecio. Aún así, le da a Alfredo una flor —una camelia—, al tiempo que le dice que vuelva cuando ésta se marchite, lo que ocurre al día siguiente.

Violetta abandona su vida pasada y se ha retirado al campo con Alfredo, donde vive felizmente. El padre del joven visita a Violetta y le pide que renuncie a su hijo, al ser ella un obstáculo para la carrera social y profesional de Alfredo, al mismo tiempo que se interpone en la felicidad de su hija menor, cuya boda con un hombre de buena familia se ve comprometida por la relación que mantiene con Alfredo.

Tras varios incidentes, en donde Alfredo se bate en duelo con un barón por motivos relacionados con Violetta, ésta débil por la tuberculosis que padece, fallece en su lecho, no sin antes emplazar a Alfredo a que busque y encuentre nueva compañera. El viejo Germont también se da cuenta de que actuó malamente al separarlos, pues el amor de Violetta hacia su hijo es verdadero, no el capricho de una cortesana acostumbrada a estar rodeada de amantes de toda condición.